sábado, 19 de diciembre de 2009

Soplando las velitas dos veces...

Hace días mientras ayudaba en las labores del hogar a mi madre, escuche algo en lo cual diré me dejo escuchar muy claramente una enseñanza de parte de Dios.


Recuerdo estar limpiando el closet, pensando en mis planes para el próximo año, pensando aterrorizada que quizás este año que empezaría seria igual o peor, que quizás esos planes ni se realizarían, en que ni me ilusionara tanto, que de seguro fracasaría. Por un momento pensé que este año de verdad era el peor, pude sentir el olor de agua estancada en mí, por que así me quede o al menos eso percibí, estancada sin avanzar ni un solo centímetro en 365 días.


En ese momento, alcance a escuchar algo lejano el canto de mi mama, cantando las tradicionales mañanitas, algo raro, pero que me voló los sesos (en sentido figurado). Y escuche algo muy dentro de mí que dijo “así de ridículo es el no avanzar o creer que no avanzaste en un año”. Y creo que es cierto, a veces pensamos que en realidad no hemos hecho mucho en un año, nos sentimos sin fuerzas, sin trofeos que presumir y sin aplausos que escuchar, pensamos que le soplamos dos veces en un año alas velitas, pensamos que en realidad nada cambio que nos quedamos en una edad, que celebramos el mismo cumpleaños, nos sentimos asqueados, frustrados, sabiendo que pudimos aver dado mas y por miedo no lo hicimos. Pero oh!! Sorpresa , tenemos que estar atentos, al menos yo me puse mas trucha (:. Empecé a reflexionar que al menos para Dios yo no le sople dos veces alas velitas, que aunque no lo note este año crecí, avance, así como cuando pase de la niñez ala adolescencia, sin darme cuenta crecí, es como cuando vez las fotos de hace 2 años, y ha decir verdad dos años no son nada para uno, y en realidad si, si crecimos físicamente en ese tiempo y si darte cuenta.


Y así fue este año, crecí espiritualmente y emocionalmente, sin darme cuenta. Aprendí a perdonar, ha ser paciente, descubrí una ganancia en mis errores, descubrí lo valioso y esencial que es equivocarte y aprender de ello, a escuchar, a sentir, a creer mas, a saber que a pesar de mis tantas toneladas de caídas Dios siempre me amara, a que debo de determe a saborear mas los pequeños detalles que mi creador me regala a cada instante, a fotografiar en mi mente esos detalles que me robaron una sonrisa en medio de tanto estrés, a recordar las escenas de las películas que por un instante sacaron de mi una lagrima, a impregnar en mi el aroma de las sonrisas, que diré ,CARCAJADAS, que me salieron al compartir momento tan inolvidables con cada uno de mis tan queridos amigos.


En resumen este año fue tan divertido, conocí tantos sabores de helado, estrene ropa, conocí amigos nuevos, hice cosas que no hubiera echo, viaje, reí, llore, me desespere, grite, fui a muchas bodas por cierto, fui dama de honor y me deleite en Dios.


Gracias a DIOS, si a Dios mi padre, EL MEJOR, el que tiene mi foto en su cartera y en su refrigerador, el que me cobija y me da un beso en la frente por las noches, el mejor amigo y oído que pueda escucharme, que no me juzga simplemente me ayuda a darme cuenta cada día mas de sus pensamientos así a mi.


Y no, no sople las velitas dos veces este año.


but if you'll never try, you'll never know

just what you're worth.